Aeropuerto de León busca traductor de lengua exótica: inglés

Quim Monzó publicaba ayer en La Vanguardia una columna de opinión sobre Ryanair y su carismático jefe. No me apetece meterme con Ryanair, para eso ya sobra gente. Lo que me llama la atención es el enlace a Leonoticias, donde se menciona un caso esperpéntico de nuestra España valleinclanesca. Parece ser que desde el aeropuerto de León llegaron a un preacuerdo con Ryanair para ofrecer vuelos internacionales, comunicando León con "Bruselas, Frankfurt, Milán, Bolonia y Gerona (para enlaces a líneas internacionales)". En la columna de La Vanguardia, el autor, quizá sin mala intención, quizá con ganas de armarla, quita el paréntesis de la cita anterior, de forma que parece que el trayecto León-Girona sea un vuelo internacional.
En cualquier caso, la gracia del asunto está en que, desde que se fue el responsable de expandir horizontes del aeropuerto en 2009, ese precontrato con Ryanair se ha quedado en un cajón, olvidado. ¿La razón? "El problema es que el precontraro está en inglés y aquí nadie sabe inglés". ¡TOMA! Más allá de que en un aeropuerto que quiere ser internacional, nadie hable inglés, ¿qué pasa? ¿Que en León no hay traductores? ¿Que no pueden robarle Internet al vecino para subcontratar la traducción? ¿No tienen vuelos con Madrid, para que vaya un traductor de la capital?
Esto es un esperpento en toda regla. Es la España de dos velocidades: la real y la de fantasía. La de los ciudadanos de a pie por un lado y los grandes empresarios y políticos por otra. Humo y espejos.
Ya que la excusa del inglés en León me ha dado para soltar una buena perorata, no quería dejar de mencionar la fiebre por las infraestructuras. ¿Para qué quieres un aeropuerto en Lleida, en León o en Castellón? No creo que valga la pena el gasto en construirlo y mantenerlo con el volumen de pasajeros que lo van a visitar. Están condenados a ser aeropuertos de tercera regional.
¿Para qué quieres un AVE a Albacete o a Cuenca, por muy bonitas que sean sus casas colgantes? Son sólo dos ejemplos, hay muchos más: Cantabria (con Mr. Anchoas), Valladolid, etc. "Es que como está de paso, ya que se ponen, no cuesta nada hacer una estación." Hombre, hacer una estación cuesta, y si ya está hecha igual hay que adaptarla, y luego hay que mantenerla si es exclusiva para el AVE. Además, la gracia de un tren como el AVE es que va más rápido cuanto menos pare. (Los AVE a Alicante y Valencia los entiendo, así los madrileños ya pueden decir que tienen playa. Y no lo digo por interés personal, que yo prefiero los EuroMed y demás, que van suficientemente rápido y son más baratos.) Y ya que estamos, ¿por qué todos los AVEs tienen como origen o destino Madrid? Ah, la España radial, claro. Pero no, es mejor que el cuñado pegue un pelotazo vendiendo a precio de oro los terrenitos donde, qué casualidad, se construye la estación. Y ya que estás, haces una promoción de viviendas al lado, que es muy cómodo tener el AVE enfrente de casa.

Soy de Benidorm, y aquí hasta hace unos cinco años no teníamos estación de autobuses. Increíble pero cierto: sólo había una parada en medio del pueblo donde se formaban unos atascos de aúpa, con una hilera de autobuses en doble fila. Entonces decidieron hacer una estación maravillosa (prometida desde hace veinte años) y extra king size a la entrada del pueblo, con hotel, galerías comerciales y Mercadona. Hace un par de años todas las tiendas cerraron, porque no iba ni el tato, y ahora sólo queda el Mercadona abierto. El hotel creo que no llegó a abrir porque les faltaba no sé qué permiso. A la estación en sí también le faltaban unos cuantos permisos, pero fueron tirando mientras llegaban, que unos permisos de nada nunca han parado a nadie en esta Santa Comunidad Valenciana. ¿Por qué se hizo tal construcción faraónica y totalmente innecesaria? Alguien se llevaría un pelotazo, pero desde luego no fue el pueblo, ni sus ciudadanos.
Aquí tenemos tren, lo llaman Tram (hijo bastardo entre el tren y el tranvía) y va de Alicante a Benidorm y de Benidorm a Denia, a velocidad de tortuga coja porque para, no ya en todos los pueblos, sino en todos los barrios por los que pasa. Lo que nos vendría bien es un Cercanías o un Regional que conectara Alicante con Valencia por la costa (el corredor mediterráneo, lo llaman). Hace la tira de años que lo prometen y dicen que lo están estudiando. Mi padre suele bromear diciendo que no vivirá para verlo, y yo le contesto muy serio que yo tampoco.
Plano y paradas del TRAM Alicante-Denia
Ayer oí que España superará en breve en kilómetros de tren de alta velocidad a Alemania y a Francia, quedándonos los segundos por detrás de China. Yo, sinceramente, preferiría que se preocuparan de enlazar los pueblos con las ciudades con Cercanías y Regionales. Por ejemplo, ponme un Cercanías de Benidorm a Alicante o Valencia (que pare en el aeropuerto, porfaplís) y allí ya me cojo un vuelo internacional, o un tren de largo recorrido a Madrid o Barcelona. Pero no, queda más espectacular y la foto sale más mona si el President Montilla sale inaugurando el nuevo aeropuerto, aunque esté vacío y no se use.

Comitiva de autoridades inaugurando el aeropuerto de Lleida
Para acabar, dos enlaces a medios de la maligna PRISA: el reportaje de Cuatro "¿Era necesario construirlo?" y el artículo de El País "Viva la infraestructura (haga falta o no)".

Comentarios

  1. Muy de acuerdo con el esperpento del contrato y con las malas inversiones en infraestructuras, ya lo sabes. Un aviste: si vas a Cuenca, no las llames casas colgantes sino colgadas, que allí gastan bastante mala leche con el tema...

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  2. Pues tienes toda la razón, Manu. He buscado "casas colgantes" y hasta Google me lo ha corregido a "colgadas". Qué curioso, las llama todo el mundo (es un decir) "colgantes" menos los conquenses o los que se han llevado una bronca por éstos.

    Y eso que estuve en Cuenca hace unos años, y vi las casas voladas o del Rey. No tengo perdón.

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  3. Yo pensaba también que eran "colgantes"... Será porque nunca he estado con uso de razón.

    Estoy totalmente de acuerdo en lo de más cercanías y menos aves. Ya hemos experimentado cómo clama al cielo el viajecito entre Torrevieja y Bernidorm, por ejemplo, y que desde estos dos puntos más que turísticos no se pueda ir en tren o tranvía al aeropuerto de Alicante...

    En fin, es lo que tenemos.

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